domingo, 17 de noviembre de 2019

Smashing Pumpkins: Adore Era (Talk to Him Podcast)


Es probable que algún lector de este blog haya leído en su momento el artículo especial que dediqué a Mellon Collie & infinite Sadness de Smashing Pumpkins, o bien quizás hayan escuchado el episodio del podcast Talk to Him que dediqué a esa época en el seno de la banda de Chicago. Pues bien, hoy me toca dedicarle un homenaje a su disco Adore y a todo el microuniverso tan particular e intransferible que nos brindó Smashing Pumpkins durante aquellos últimos años 90.

Adentrarnos en la etapa Adore es embarcarnos en un viaje a través de la noche más oscura, sensible e impenetrable. Una época única e irrepetible para la banda, donde logró construirse una imagen y un sonido tremendamente personales y mágicos. Os contaré cómo llega la banda hasta su concepción, los directos de la época, las posteriores reediciones, las canciones escondidas, su repercusión... todo ello mezclado como siempre con mis anécdotas vitales relacionadas con su aparición. Y es que la música nos construye por dentro y nos convierte en lo que somos. Las silenciosas tierras nocturnas de Adore se dibujan en la silueta del horizonte, adentrémonos en su portal dimensional eterno, perdido en las espirales de la memoria.

 


Y como complemento a este programa, os dejo aquí uno de los directos de la época. Se trata del concierto en el Jardín Botánico de Bruselas dentro del marco de la gira europea de Adore en 1998. Sus shows de entonces destacan por el enfoque que dan a sus canciones clásicas y por la riqueza de detalles y atmósfera que transmiten a su cancionero, tan bella como deliciosamente oscura y distante. Un frondoso bosque perdido en el que merece la pena perderse de vez en cuando para encontrarnos con nosotros mismos y los fantasmas de la memoria.

sábado, 9 de noviembre de 2019

Propaganda Electoral. Por Raúl del Olmo.

Diseño y creación de la imagen: Andrés Menchén

Volvía de un paseo impreciso, de esos que se hacen sin saber por qué ni a dónde, acompañados de una voluntad nula y caprichosa.

Abrió la pesada puerta metálica del portal y se dispuso a otear si había algo en el buzón. Nadie escribe, y las facturas de papel se mantienen como una vetusta reliquia del siglo pasado. Él ya tenía todas las facturas electrónicas, como manda el libro de estilo del buen occidental moderno. Aún así, instintivamente acercaba sus ojos a la brecha del compartimento metálico.

En la parte destinada a los habitantes de su piso, un deformado rectángulo de papel mostraba el nombre de dos personas muertas junto al suyo, escritos con tinta azul en dirección ligeramente descendente. Para qué cambiarlo, pensaba, si los vivos y los muertos ya no se diferencian más que por el hecho de seguir respirando unos y luchar por ser olvidados los otros.

Escudriñó el interior descubriendo un sobre acartonado con toda la apariencia de estar facturado en material reciclado y, sobre él, un flyer del Domino's. Giró la llavecilla y subió el tramo de escaleras hasta su casa con las dos comunicaciones en su mano.

Tras prepararse una cena insignia de perdedores con dignidad, consistente en un tomate regado de aceite de oliva, se preparó una infusión de cola de caballo y se acomodó en el sillón. Encendió su SmartTV, seleccionando el app de Youtube para que el apartado de sugerencias eligiera por él lo que le gustaba y lo que le apetecía; delegar para no decidir, rabioso vicio de moda.

Sin prestar la menor atención a lo que apareció en pantalla, se dispuso a abrir ese misterioso sobre reciclado que había rescatado de su buzón. Unas siglas marrones le llamaron la atención en la esquina inferior izquierda del haz: PER. Enseguida comprendió que se encontraba ante propaganda electoral. Tras haber tirado a la basura los días anteriores el resto sin prestarles la menor atención, la novedad que suponía encontrarse frente a un  partido político desconocido, le hizo decidirse a leer la carta que contenía, sin convicción y por hacer algo, lo mismo así tenía un tema de conversación en el trabajo para el día siguiente.

Terminó de leerla y se quedó inmovilizado y con la boca abierta. Tuvo que volver a leer los párrafos más inauditos -o lógicos, según se mire- porque no podía ser cierto que este partido emergente hubiera escrito una misiva así a la ciudadanía de su país.

"Estimad@ ciudadan@ del mundo:

Seguramente estarás cansad@ de recibir cartas como esta pidiendo tu voto. PER ha nacido para que sea la última vez que recibas propaganda electoral; es más, que sea la última vez que tengas que decidir si votas o no y, en el caso de hacerlo, a quién votas. El Partido Ecologista Radical (PER) nace con una perspectiva universal y las próximas elecciones de tu país son las elegidas para darse a conocer.

Frente a otras propuestas enarboladas por la "ecología cobarde", PER apuesta por una conservación asegurada y con futuro pleno para La Tierra. Para ello, nuestro fundamento y objetivo es sólo uno: la completa extinción de la especie humana.

El ser humano es el único animal con capacidad e intención de destruir su planeta, su hogar. Por tanto, la erradicación de su existencia es un bien común colectivo para la supervivencia del mismo. Con este planteamiento único y global terminamos con diversos problemas: desde la falta de recursos a la explotación indiscriminada de nuestro lugar en el universo.

Para lograr nuestro objetivo, nuestra principal propuesta es clara: la prohibición absoluta de la procreación. Esta medida de urgencia impediría el tremendo acto egoísta de traer descendencia humana, evitando con ello la ampliación de población que supone, a su vez, un aumento de la explotación de recursos y malestar general para nuestro planeta. Las personas que infrinjan esta medida serán duramente sancionadas por su completa insolidaridad con el resto de seres humanos que cohabitan en La Tierra y, por supuesto, con el ecosistema natural. Igualmente, se implantará un sistema gratuito de esterilidad asistida para ambos sexos con dotaciones suficientes para cubrir la demanda de peticiones que en este sentido surjan.

El fracaso como especie justifica por sí mismo este argumento que, además, supone la paridad definitiva entre seres humanos: todos somos iguales ante el hecho de sobrar. Un mundo sin la intervención de personas es un mundo libre; (...) tenemos ejemplos donde ha medrado una exuberante libertad salvaje, como Chernobyl tras la hecatombe nuclear.

Igualmente, viejos discursos políticos o absurdos planteamientos supuestamente novedosos carecen de sentido alguno. PER termina con la radicalización capitalista del consumo desmesurado liberal y, también, elimina de facto planteamientos marxistas como considerar la lucha de clases el elemento dinamizador de la historia.

De hecho, este sí es el verdadero fin de la historia, (...) debemos desaparecer por completo. Con constancia, convicción, orgullo y decisión. Para ello, no faltarán presupuestos y acciones gubernamentales encaminadas a facilitar el suicidio voluntario y, en los núcleos familiares que fomenten razonadamente quitarse la vida entre sus miembros, subvenciones y ayudas en compensación a tan honorable fin.

(...)

De la arcaica idea del todo para todos pasaremos al nuevo paradigma del nada para nadie. Contamos con tu voto. Otro mundo sin personas es posible".

Abrió de par en par sus ojos y miró la pantalla del televisor, pulsó el botón de mute mientras se rascaba la cabeza. Giró su cintura hacia la izquierda ahuecando el culo del sillón para tirarse un pedo sordo. Una generosa ración de CO2 invadió la estancia. Al fin y al cabo, ser vegano tenía sus efectos colaterales.